Tragaluces
Los tragaluces y la eficiencia energética
El uso de tragaluces transparentes o translucidos en el sector de la construcción no ha recibido toda la importancia que se merece. Este tipo de materiales son una solución inteligente que proporciona luz natural a todas esas estancias y edificios donde se necesita una iluminación extra para evitar aumentar los niveles de energía eléctrica.
Los tragaluces son materiales secundarios que se complementan y se integran a la perfección con el resto de techos, cubiertas incluso paredes construidos con panel sandwich. Cuentan con excelentes cualidades entre las que no solo destacan la de dejar pasar la luz solar, sino también, un buen aislamiento térmico regulando las temperaturas. Además, si se colocan los lucernarios de forma inteligente el usuario podrá llegar a reducir los costes relacionados con calefacción debido a su fuente de luz natural.


Tipo y calidad de luz
Gracias a los lucernarios de Panel Sandwich Group el cliente se podrá beneficiar de una excelente iluminación en el interior de cualquier tipo de edificio debido a sus múltiples aplicaciones. En general, lo recomendable es que estos materiales estén formados por Láminas de Policarbonato Celular y se pueden distinguir diferentes tipos de iluminaciones:
- Iluminación directa: los rayos del sol entran directos iluminando una zona concreta y limitada.
- Iluminación difusa: La luz solar atraviesa el policarbonato o tragaluces abarcando zonas más amplias. Este tipo de luz es recomendable cuando se necesite iluminar estancias muy extensas para reducir el gasto energético.
Lo primero de todo es conocer cuál es el punto de equilibrio ideal entre la luz natural y la artificial antes de su instalación, así conseguiremos el resultado y eficiencia óptimo en la instalación. Como todos los proyectos son diferentes, el cliente deberá decidir todas estas cuestiones ajustándose a sus propias necesidades.
Desde Panel Sandwich Group recomendamos que, en general, los lucernarios o láminas de policarbonato no deben ocupar más del 10% del techo. Para obtener la iluminación y el aislamiento idóneo tendremos que tener en cuenta la organización de la estancia y evitar los sobrecalentamientos en el interior.
Configuración de las láminas de policarbonato
Antes de instalar los tragaluces, hay que tener en cuenta los siguientes requisitos:
- Prestar atención a las medidas del edificio (altura, capacidad, etc.) para calcular la cantidad de claraboyas necesarias para una buena iluminación
- Requerimientos especiales de iluminación para zonas específicas
- Frecuencia de mantenimiento de cobertura y facilidad de acceso a ella
Los tragaluces o láminas transparentes pueden fabricarse en varios diseños y modelos, pero sobre todo el cliente podrá instalarlos en varias posiciones diferentes para sacarles el máximo partido:
- Posición en ajedrezado. Es la posición de montaje más común y consiste en colocar claraboyas de forma individual a lo largo de todo el techo con una separación considerable para poder garantizar una correcta iluminación en todo el edificio o nave. La forma correcta de instalación es asegurando el tornillo en un agujero más ancho para que en caso de dilatación no se produzcan roturas.
- Tragaluz redondeado. En este caso la distribución de la luz será uniforme a lo largo de toda la sala, se recomienda instalarlo solo en techos de baja pendiente.
- Posición caída de agua completa. Las planchas de policarbonato pueden instalarse a largura completa en todo el techo una tras otra, es decir, desde la línea que comienza la cubierta hasta la canal. Con esto se consiguen franjas amplias de luz con menos juntas para el sellado.
- Posición a media agua. Es la posición intermedia entre la de ajedrezado y la línea de techo al canalón. Siempre en dirección a la caída de agua.
- Tragaluces planos de recorrido continuo. Se trata de una instalación que ofrece buenos niveles de iluminación, pero su uso durante los últimos años es limitado porque deben cuidarse al máximo las tolerancias de producción y acoplamiento con los elementos de cobertura
Materia prima en la fabricación de tragaluces
Las materias primas utilizadas para la fabricación de los lucernarios no solo deben permitir un paso de luz idóneo para la iluminación de cualquier tipo de estancia, sino que, entre sus cualidades también deben cumplirrequisitos de seguridad, protección, aislamiento y resistencia al fuego para convertirse en materiales perfectamente constructivos. Los principales materiales que se utilizan en la producción de tragaluces son: policarbonato, fibra de vidrio, vidrio y PVC.
Policarbonato
Las láminas de policarbonato son el material más común en la fabricación y construcción de lucernarios. Cuenta con unas propiedades técnicas y mecánicas muy valiosas entre las que destacan: la gran capacidad de transmisión de luz sin excesos de calor,aislamiento térmico óptimo, comportamiento al fuego y resistencia a impactos de posibles agentes externos. Destaca su adaptabilidad y manejabilidad, se adapta a proyectos de ciertas complejidades y cuenta con excelentes propiedades de iluminación y paso de luz.
Su diseño también es muy característico, ya que, los tragaluces fabricados con policarbonato cuentan con pequeñas cámaras de aire o celdas que proporcionan luz directa o difusa en función de su instalación. En Panel Sandwich Group trabajamos con esta láminas de policarbonato por las cualidades y ventajas que nos aporta.
Fibra de vidrio
En el caso de que un cliente precise de claraboyas redondeadas, el material más idóneo para estas construcciones (entre otras) es la fibra de vidrio, ya que, cuenta con unas propiedades excepcionales y ofrece altos niveles de iluminación difusa. La fibra de vidrio es el material más utilizado y resistente para lucernarios ya que cuenta con alta calidad protegiendo las estancias de los rayos ultravioleta y evita fugas térmicas.
Vidrio de seguridad
El vidrio cuenta con un buen comportamiento al fuego, protección ante posibles impactos y una buena transmisión de la luz solar, por eso, su utilización se ha popularizado en los últimos años en construcciones de todo tipo de sectores: comerciales, residenciales, etc. Es un material muy versátil y puede redondearse, plegarse y fabricar en multitud de acabados.
PVC
Al contrario que el resto de materias primas utilizadas para la fabricación de tragalauces, el PVC es el que menos cualidades interesantes presenta. Ofrece un paso de luz óptimo, pero no es resistente a impactos de agentes ambientales. Además, para su correcto funcionamiento son necesarias medidas de seguridad adicionales.
Tragaluz en forma de cúpula
El tragaluz redondeado en la línea de techo se construye a partir de una plancha de policarbonato en forma de línea de abeja con curva autoportante, con un espesor de 10-16 mm y una anchura de 650 mm. Se fabrica con capacidad de protección ultravioleta y en varios colores, siendo idóneo para coberturas curvas con radio fijo en unos 3.500 mm.
La estructura portante se construye mediante apoyos transversales curvos autoportantes de sección cuadrada y junta abierta. Debe colocarse a una distancia de 6.5 cm aproximadamente. En estos soportes se introducen unos perfiles de la lámina de perfilado permitiendo un perfecto sellado.
Las claraboyas en forma de cúpula cuentan con la posibilidad de abrirse para permitir la circulación del aire, ya sea de forma automática o manual. Normalmente la cúpula está formada por policarbonato y un soporte de metal, PVC o fibra de vidrio que alza la cúpula como mínimo de 150 y se fija a la estructura del techo mediante orificios que contemplen la dilatación térmica.


Líneas maestras de la instalación
Los pasos a seguir para instalar lucernarios de perfil trapezoidal son los siguientes:
- Las alas de sus extremos deben solaparse o apoyarse sobre los extremos del otro elemento contiguo de la cubierta
- Situar el tragaluz entre las dos placas metálicas del panel sandwich
- Instalar una red de seguridad de forma que se aumenten las medidas
- Utilización de fijaciones que aseguren la instalación y que resista todo tipo de sobrecargas y agentes externos.
- Es importante tener en cuenta que los tragaluces de policarbonato o PVC pueden sufrir dilataciones con el calor por lo que el tornillo utilizado para su fijación deberá ser un poco más estrecho que el agujero realizado. Así en caso de dilatación evitamos la fractura de la lámina
- Al menos, debe instalarse una franja de sellante en ambos lados de la lámina, entre el tragaluz y la chapa metálica del techo.
Desde el Panel Sandwich Group recomendamos que las láminas de policarbonato o claraboyas no superen los 6 metros de longitud, así evitamos todo tipo de tensiones. En cambio, los tragaluces que están compuestos por fibra de vidrio no cuentan con este problema de dilataciones.
Condiciones a respetar en la instalación de tragaluces
Para lograr una instalación óptima del tragaluz, se recomienda seguir las siguientes indicaciones:
- En el momento de la elección del tragaluz es muy importante que cuente con el mismo aislamiento térmico que el resto de materiales del proyecto, como es el caso de los paneles sandwich. Hay que tener especial cuidado con la aparición de puentes térmicos a lo largo de toda el techo.
- Las claraboyas o lucernarios, por su composición y características, suelen sufrir con el paso del tiempo algunas variaciones de diseño (color, estética, etc). Esto suele ocurrir porque se van degradando, por lo que desde Panel Sandwich Group recomendamos siempre planificar al a perfección su instalación y cuidar al máximo los detalles para que el deterioro llegue lo más tarde posible.
Atender todos los detalles
Aunque los tragaluces cuentan con unas propiedades técnicas y mecánicas especiales que le permiten ofrece un gran paso de luz sin excesos de temperaturas y soportar golpes e impactos externos, lo cierto es que para garantizar estas cualidades siempre es necesario cumplir correctamente con una serie de requisitos:
- Montaje inicial correcto
- Que las fijaciones sean las idóneas y acorde con el tamaño
- Vigilar que se utilizan las fijaciones suficientes para evitar fugas
- Propiedades de las arandelas
- Prestar atención a las juntas de unión por su posible deterioro
- Un mantenimiento riguroso y adecuado
Vida útil
Los tragaluces cuentan con un proceso de deterioro mucho mayor que el panel sandwich a lo largo de su vida útil por varios aspectos. No obstante, este proceso de deterioro variará en función del material utilizado en su fabricación:
- Fibra de vidrio. Las claraboyas fabricados con fibra de vidrio tienen una larga vida útil que supera los 30 años. No obstante, la luz directa del sol y los agentes atmosféricos hacen que el color comience a deteriorarse en el quinto año pero sus propiedades permanecen intactas hasta después de varias décadas.
- Los tragaluces formados por planchas de policarbonato proporciona una vida útil superior a los quince años, con un lento deterioro de sus propiedades. No obstante, debe tenerse cuidado con los materiales que se instalan en contacto con el policarbonato, pues pueden alterar sus propiedades.
- Los lucernarios con PVC son los menos recomendable ya que su vida útil es muy reducido y se empiezan a deteriorar ya en los primeros años. Además, son bastante frágiles y necesitan medidas de protección adicionales.
Mantenimiento
El mantenimiento de los tragaluces y planchas de policarbonato debe ser más minucioso que los paneles sandwich. Según el tipo de montaje que se haya realizado y el ambiente en el que se encuentren instalados. Una de las principales razones más comunes del deterioro de los tragaluces es el paso del tiempo y las agresiones de agentes meteorológicos. Por lo que los controles rutinarios y mantenimientos deben ser más rigurosos que con las placas sandwich.
Las láminas o planchas de policarbonato deben limpiarse regularmente para eliminar la suciedad superficial, primero con agua caliente y detergente para repasar después con un paño o cepillo. Aclarando finalmente con agua para un resultado espectacular. De esta manera, se mantienen elevados niveles de transmisión de luz y de absorción de calor, conservando las propiedades estructurales del tragaluz.
A su vez, es recomendable realizar inspecciones de los materiales una vez al año como mínimo, preferiblemente a la vez que se realizan las labores de limpieza. En estos controles rutinarios de podrán comprobar si existentes desperfectos estructurales que comprometan la resistencia de la claraboya en la cubierta. Otro de los puntos en los que hay que prestar especial atención es el encuentro entre tragaluces y Paneles Sandwich Techo.
Si se cumplen con todas estas operaciones de limpieza y mantenimiento es fácil que la vida del tragaluz o plancha de policarbonato de extienda hasta aproximadamente tres décadas. A su vez, conociendo esta vida útil es necesario que se estudie la renovación de los mismos con tiempo para no perjudicar en la estructura del edificio.